¿Podemos prepararnos para una intervención quirúrgica?: La importancia de la prehabilitación quirúrgica
Cuando afrontamos una intervención quirúrgica, es frecuente escuchar que tras el procedimiento se suele necesitar una rehabilitación para volver al estado funcional que el paciente tenía antes de la misma, o al menos aproximarse a su estado previo lo antes posible. Pero, ¿podemos hacer algo para prepararnos antes de una cirugía? ¿podemos mejorar la condición en la que nuestro cuerpo llega a una intervención?. La respuesta es sencilla: no sólo podemos hacerlo, sino que es recomendable, ya que ha demostrado que disminuye las complicaciones.
La prehabilitación es un programa multidisciplinar de evaluación y manejo preoperatorio, en que se pretende conseguir las mejores condiciones físicas y mentales de nuestros pacientes para poder afrontar un tratamiento agresivo de forma optimizada.
El concepto de prehabilitación nace como un programa creado para mejorar la capacidad funcional del paciente antes de la cirugía mediante la actuación en tres aspectos: actividad física, adecuada nutrición y reducción del componente de ansiedad, y esto es aplicable a cualquier paciente, independientemente de su edad. Sin embargo, el aumento de la esperanza de vida de la población en general lleva implícito el aumento progresivo de la edad media de nuestros pacientes y, en consecuencia, mayor número de pacientes frágiles o con múltiples enfermedades asociadas que deberán someterse a una cirugía mayor, lo que supone una mayor morbimortalidad postoperatoria y una reducción importante de la capacidad fisiológica y funcional. De esta forma, los pacientes frágiles sometidos a cirugía programada tienen más complicaciones postoperatorias y hospitalizaciones más prolongadas, con el riesgo de no recuperar su capacidad funcional previa.
¿Qué es la prehabilitación?
En el mundo de la medicina y la salud, a menudo escuchamos la importancia de la rehabilitación, que es un proceso esencial para recuperarse de lesiones o procedimientos médicos y quirúrgicos. Sin embargo, en los últimos años, ha surgido otro concepto: la prehabilitación. A diferencia de la rehabilitación, la prehabilitación se enfoca en fortalecer el cuerpo antes de enfrentar una cirugía o un tratamiento médico importante. Este enfoque preventivo y proactivo está revolucionando la manera en la que abordamos la salud y el bienestar.
La Prehabilitación se refiere a la preparación física y mental de un paciente antes de someterse a una cirugía u otro procedimiento médico que pueda ser desafiante para el cuerpo La prehabilitación se enfoca en fortalecer el cuerpo antes de enfrentar una cirugía o un tratamiento médico importante.
Tiene como objetivo mejorar la condición física y emocional de un paciente antes del evento médico, lo que puede resultar en una recuperación más rápida y satisfactoria.
¿Por qué es necesario prepararse para una intervención quirúrgica?
La agresión ocasionada por una actuación quirúrgica desencadena una respuesta inflamatoria por una doble vía: la activación del sistema inmune, mediada por la liberación de hormonas neuroendocrinas, y la estimulación del sistema hipotálamo simpático, con la consiguiente liberación de catecolaminas y cortisol. Así se desencadena una fase inicial de resistencia periférica a la insulina y un incremento del catabolismo (o destrucción) proteico.
La magnitud de la respuesta inflamatoria es proporcional al grado de agresión quirúrgica; por tanto, cuanto mayor es la herida quirúrgica, la manipulación de órganos y la disección de tejidos, mayor es la respuesta metabólica desencadenada.
Por todo lo anterior, es fácil de entender la importancia de llegar a este momento en las mejores condiciones posibles, para afrontar esta agresión de la manera más optimizada y conseguir que las consecuencias de las mismas sean minimizadas gracias a un mejor punto de partida antes de la intervención.
¿Cómo funciona la prehabilitación?
La prehabilitación implica una combinación de ejercicio físico, terapia nutricional y apoyo psicológico. Antes de la cirugía, se desarrolla un plan de prehabilitación personalizado según las necesidades y la salud del paciente. Esto puede incluir ejercicios de resistencia, entrenamiento cardiovascular y estiramientos para fortalecer los músculos y aumentar la resistencia.
El objetivo principal es la optimización del paciente durante el periodo de tiempo preoperatorio (diagnóstico-intervención) con la finalidad de mejorar la capacidad funcional y disminuir las complicaciones derivadas de la cirugía.
Además de la preparación motora o musculoesquélica, la terapia nutricional se enfoca en proporcionar al cuerpo los nutrientes necesarios para optimizar su funcionamiento y ayudar en el proceso de recuperación. Además, el apoyo psicológico es crucial para reducir el estrés y la ansiedad, lo que puede influir positivamente en el resultado final.
Aunque existe variabilidad en tiempos y ejercicios a realizar, la mayoría de grupos establecen programas de 2 a 4 semanas de entrenamiento ya que ese período permite obtener incrementos evidentes en la capacidad funcional del paciente.
¿Cuáles son los beneficios de la Prehabilitación?
- Mejora la resistencia del cuerpo: Al fortalecer los músculos y mejorar la capacidad cardiovascular antes de una cirugía, el cuerpo está mejor preparado para enfrentar el estrés físico que conlleva el procedimiento.
- Reduce el tiempo de recuperación: Los pacientes que se someten a prehabilitación experimentan una recuperación más rápida y efectiva después de la cirugía. Los músculos fortalecidos y los sistemas corporales en óptimo estado pueden ayudar a reducir el tiempo de hospitalización y acelerar la rehabilitación.
- Mejora el resultado de la cirugía y dismunuye las complicaciones: Los estudios han demostrado que los pacientes que se someten a prehabilitación tienen menos complicaciones después de la cirugía y pueden lograr resultados más satisfactorios en términos de recuperación funcional.
- Reduce el estrés y la ansiedad: La prehabilitación no solo se trata de fortalecer el cuerpo, sino también de preparar la mente. La reducción del estrés y la ansiedad antes de la cirugía tiene un impacto positivo en la respuesta del sistema inmunológico y en la percepción del dolor.
Esta preparación precisa de una participación muy activa por parte del paciente, y para ello es preciso que entienda la trascendencia de su esfuerzo.
La prehabilitación debe abordarse desde un modelo multidisciplinar donde participan muchos especialistas, las unidades de nutrición, rehabilitación, cirugía, anestesia, psiquiatría, psicología y enfermería. De forma global, consiste en los siguientes puntos para conseguir beneficios objetivos:
EJERCICIO FISICO
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- ↑ Masa Muscular y Calidad del Músculo
- ↓Resistencia a la insulina, respuesta inflamatoria y estrés/ansiedad
TERAPIA NUTRICIONAL
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- ↑ Masa Muscular y Cicatrización
- ↓ Infección y estancia hospitalaria
TERAPIA COGNITIVA
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- ↑ Calidad del sueño
- ↓ Fatiga, estrés y depresión. ↓ inflamación
DESHABITUACION TABAQUICA
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- ↑ Cicatrización de las heridas
- ↓ Riesgo de complicaciones cardiopulmonares, infección del sitio quirúrgico y fuga anastomótica
CORRECCION DE LA ANEMIA
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- ↑ Potencia aeróbica y recuperación postquirúrgica
- ↓ Respuesta catabólica al trauma y complicaciones cardiopulmonares
La prehabilitación es está cambiando la forma en que nos acercamos a los procedimientos médicos importantes, donde el paciente tiene que entender la importancia de involucrarse en su propio proceso de reuperación y no participar de forma pasiva ante una intervención. Al tomar medidas para fortalecer el cuerpo y la mente antes de enfrentar un desafío médico, los pacientes pueden experimentar una recuperación más rápida y efectiva, lo que les permite volver a su vida normal con mayor calidad de vida y de forma más rápida, disminuyendo las complicaciones.
Aunque en este post hemos hablado de la prehabilitación para la cirugía, esta optimización del paciente es aplicable a otros ámbitos de la medicina, como la oncología, donde también se ha demostrado beneficio.
Basándonos en la evidencia actual podemos decir que la prehabilitación es importante para todos los pacientes que se van a someter a tratamientos médicos importantes, y sobre todo para aquellos pacientes que presenten una condición física limitada y un riesgo nutricional elevado.
En un escenario donde la población está experimentando un proceso de envejecimiento y fragilidad creciente, y al mismo tiempo con el deseo de una recuperación que les permita retornar a su vida diaria mientras conservan un nivel de calidad de vida comparable al período previo a la cirugía, la preparación preoperatoria es fundamental para conseguir un buen resultado final en todos los aspectos.